Con un par de días de retraso según os habíamos prometido, comenzamos a trabajar para conseguiros la mejor información del MUNDO CANNÁBICO.

Este mes de Julio os mantendremos informados sobre la HISTORIA DEL CANNABIS.

Artículos creados por nuestros colaboradores y publicados en las distintas ediciones de nuestra Revista CANNABIS MAGAZINE profundiza en las raices de la innegable necesidad del ser humano de evadir su conciencia a través del cannabis.

Ilustrados con foto, video y todos los recursos multimedia queremos que tengais en nuestra publicación una fuente inagotable de información sobre este mundo que tanto nos atrae.

Esperamos que os guste

César Padial

Comenzaremos con una historia que publicó en nuestro FORO Isidro Marín

Podeis daros una vuelta por nuestro FORO y daros de alta para compartir y debatir toda la información que entre todos estais aportando a este gran proyecto.

Aquí os dejo el enlace del foro a la sección de HISTORIA DE LAS DROGAS

En el año 1155 se atribuye el descubrimiento del hachís (Lozano, 1990:118). Ese año Haydar, el fundador de la secta sufí, descubre los efectos del cannabis. Haydar es un monje ascético que vivía una vida de privación rígida en un monasterio que construyó en las montañas de Persia, entre Nisapur y Zawah. Durante diez años vivió una vida retirada sin ver a nadie excepto sus discípulos. Un día, a la hora de la siesta, cuando el sol empezaba a declinar, Haydar abandonó su retiro y salió al desierto sin compañía alguna a hurtadillas. Cuando salió al campo se encontró que todas las plantas estaban quietas, a causa del calor y además no soplaba viento alguno.

Haydar pasó junto a una planta que tenía hojas de deslumbrante belleza y vio que se balanceaba suavemente. Entonces la planta le habló y le reveló su secreto diciéndole: “Come de las hojas de esta planta pues esto es uno de los mayores actos de piedad que concebirse pueden. Ella es el alimento de quienes reflexionan sobre el sentido de nuestras vidas, y el vino de quienes consideran nuestras faltas”. Y cuando comió de la planta lo embargó un inmenso deleite y éxtasis, y se vio a sí mismo en una visión asombrosa y anhelada hermosura. Cuando Haydar comprendió su secreto regresó a su convento y les comentó a sus compañeros lo que había sucedido.

Les ordenó que comieran de la planta y que ocultasen su secreto a los que no pertenecieran a la comunidad. Haydar vivió diez años más y luego murió. Comía todos los días cannabis. Poco antes de su muerte en 1221 dijo que pusieran hojas de cannabis alrededor de su tumba para que su espíritu pudiera caminar en la sombra de la planta que le había dado tanto placer durante su vida (Abel, 1980) (Lozano, 1998: 77) (Robinson, 1912: 23).

Los sufíes son sacerdotes místicos musulmanes, que la utilizaban en sus complicadas danzas rituales para alcanzar el éxtasis (para conseguir la revelación divina e interior y la comunicación con Alá). Muchos estudios revelan que el misticismo de los sacerdotes sufíes procede de los seguidores de Zaratustra que sobrevivieron a la conquista musulmana que tuvo lugar entre los siglos VII y VIII d. C. y que sufrieron la conversión al Islam (Herer, 1999:140). También los sufís tienen siete procesos de iniciación que se asemejan a los cultos de Mitra y la religión nóstica. La palabra sufí, viene de suf que significa lana en árabe. Esta secta llevaba ropa de lana desgastada (por lo tanto el sufí, “una persona que desgasta la ropa de lana de un asceta”) en vez de algodón y se les condenó por imitar a Jesús (esta secta tiene muchas ideas semejantes al cristianismo) y no a Mahoma (que llevaba prendas de algodón).

Los líderes originarios eran ortodoxos en sus principios religiosos, sus sucesores y los nuevos miembros que fueron atraídos al movimiento sufí adoptaron un acercamiento más místico hacia la religión que era contraria a la ortodoxia islámica. Los nuevos seguidores eran de clases bajas, la clase alta desconfiaba de las actitudes socio-políticas del sufismo.

Los líderes religiosos estaban en contra de los sufíes porque predicaban que la verdad divina y la comunión con Dios no se puede impartir a otros, se tiene que experimentar directamente.

Existían diferentes maneras para alcanzar tal estado, uno de ellas era consumiendo hachís (era el medio para estimular la conciencia mística y apreciar la naturaleza de Alá). El comer hachís se convierte en un “acto de culto” como la eucaristía para los cristianos. Los sufíes eran un contraste al Islam ortodoxo, y tenían un acercamiento a Dios más místico a través de la embriagación del hachís. Se les culpó del aumento de sectas islámicas y de extender el consumo de hachís.

Isidro Marín Gutiérrez

 

 

Acerca del autor

Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.