Ya no hay adivinos. Rappel ha sido derrotado por los algoritmos. El futuro lo decide una fórmula matemática. Según informa el diario lisboeta ‘Público’, tres profesores de la Universidad de Oporto han creado un algoritmo para su consultora privada que predice en qué países se va a legalizar próximamente el cannabis, ya sea para uso medicinal, ya sea para uso recreativo. A partir de miles de datos, con técnicas de inteligencia artificial y considerando 98 variables (contexto religioso y económico, libertad de prensa, legalización de matrimonios homosexuales, popularidad de los debates en Internet sobre el tema, etcétera), han elaborado una lista de países del mundo donde es muy posible que acabe legalizándose el cannabis.

Lo curioso del caso es que están acertando. Esa lista está encabezada por Australia y el Reino Unido, ocupando Luxemburgo el tercer lugar. Pues resulta que Luxemburgo acaba de anunciar que se plantea ser el primer país de la Unión Europea en legalizar el cannabis para uso recreativo. Portugal, que ocupa el puesto 13 en la lista, ya legalizó en junio el uso de esta sustancia con fines medicinales. Suecia, que también está entre los primeros de la lista, es el siguiente país que va a legalizar el uso medicinal del cannabis y aparecen también España e Irlanda en el grupo de cabeza de la lista de países donde más

Más allá de las consideraciones sanitarias o morales, los pronósticos del algoritmo, que por ahora se están cumpliendo, pueden tener consecuencias económicas en Extremadura. Las continuas incautaciones de plantas en la región por la Guardia Civil cuando llega la temporada de la cosecha de cannabis es una buena muestra de la idoneidad de nuestras tierras, sobre todo en el norte de la región, para este cultivo.

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Al otro lado de la frontera, en el Alentejo, hay una plantación de cannabis en Évora desde 2014, participada por una multinacional farmacéutica, y existen otros dos proyectos de multinacionales de Israel y Canadá. La empresa canadiense, llamada Tilray, pertenece a la norteamericana Privateer Holdings, propiedad de la marca Marley Natural, que elabora productos medicinales con cannabis bajo el sello de la familia del popular músico Bob Marley.

Portugal toma posiciones ante un mercado en el que quien primero se convierta en referencia tendrá mucho ganado. Se estima que el mercado del cannabis podría llegar a mover 35 millones de euros anuales. Según el Observatorio Europeo de Drogas y Toxicomanía, en Europa hay 12,5 millones de personas que consumen marihuana regularmente mientras que 87 millones lo hacen de manera esporádica

Las parcelas permitidas para su cultivo están en la Raya, en el entorno del embalse fronterizo de Alqueva y de sus regadíos, donde las empresas transnacionales del cannabis han puesto sus ojos ante los posibles cambios en la legislación portuguesa y teniendo en cuenta que el cannabis portugués tienen más calidad que el que se cultiva en las 130.000 hectáreas dedicadas a esta planta en Marruecos. No hace falta ser muy avispado para entender lo que supondría su cultivo en la Vera o el Tiétar.

El uso del cannabis para usos medicinales está legalizado en 33 países del mundo. El pasado mes de diciembre se incorporó a la lista Tailandia. Con fines recreativos, es legal en Uruguay desde 2013 (se pueden cultivar hasta seis plantas en casa), también es legal en Canadá (permiten cuatro plantas en casa) desde octubre de 2018 y en diez estados de Estados Unidos, los primeros fueron Colorado y Washington en 2012. En España y Holanda no es legal, pero se permite su uso controlado. En Portugal, el Bloco de Esquerdas, que apoya al gobierno socialista, acaba de proponer la legalización del uso recreativo del cannabis. El algoritmo avisa de que España será uno de los siguientes países en legalizarlo y los agricultores extremeños permanecen atentos.

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Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.