Público’ y la Encuesta Global sobre Drogas se asocian de nuevo para estudiar el consumo en España. El objetivo del sondeo, que el año pasado logró más de 100.000 participantes en 50 países, busca analizar el consumo en España de alcohol, cannabis, cocaína o anfetaminas y contabilizar las personas que compran drogas a través de Internet.

La cocaína sigue siendo una de las drogas más consumidas en todo el mundo. En España, se estima que aproximadamente un 10% de la población la ha probado alguna vez en la vida y que un 1% es consumidora habitual. Su precio se ha mantenido relativamente estable, en torno a unos 60 euros por gramo, independientemente de las épocas de crisis o de bonanza. Quizá sea esta una muestra de lo importante que es el mercado global de esta sustancia.

Como todo mercado, el mercado de la cocaína genera ingentes beneficios económicos. Su elevado precio y las tácticas del mercado hacen de éste un negocio muy lucrativo. Sin embargo, algunos expertos comienzan a alertar de que este negocio ha comenzado a moverse para competir con la llegada de nuevas drogas y atraer a clientes con diferentes poderes adquisitivos y expectativas. Así, el Observatorio Europeo para las Drogas y las Toxicomanías (EMCDDA) advirtió en su último informe de 2015 de que la pureza de la cocaína está experimentando un aumento aunque su precio permanece relativamente estable.

Te puede Interesar
Las expectativas y los prejuicios de los investigadores influyen en el desempeño de los consumidores de cannabis

Sin embargo, no toda la cocaína que se vende es realmente cocaína. El uso de adulterantes es habitual para incrementar los beneficios económicos de quien trafica con ella. Los adulterantes más habituales, tal y como ha encontrado el programa Energy Control de la Asociación Bienestar y Desarrollo, suelen ser el levamisol, la fenacetina y anestésicos locales como la procaína o la tetracaína que simulan el efecto de adormecimiento (anestesia) típico de la cocaína. El levamisol, un antiparasitario, parece potenciar los efectos de la cocaína aunque no está exento de riesgos. Su consumo regular aumenta el riesgo de necrosis vascular y de agranulocitosis. Algunos de estos adulterantes pueden ser añadidos en el punto de producción, mientras que otros pueden añadirse durante su distribución.

Aun así, la cocaína sigue siendo la droga más cara. Según los resultados de la Encuesta Global sobre Drogas del pasado año, con la que Público colabora desde hace tres años, la mayoría de personas usuarias de cocaína (en torno al 80%) la consumen en unas 10 ocasiones al año en la mayoría de países y pagan por ella un precio medio de 70 euros por gramo. La cantidad habitualmente consumida suele ser medio gramo. Nueva Zelanda y Australia son los países donde la cocaína es más cara: un gramo puede costar unos 200 euros. Por el contrario, donde es más barata es en Brasil: unos 12 euros.

Los resultados de esta encuesta en España nos permitieron saber cosas como que la mayoría de quienes dijeron haber tomado cocaína, lo hacían esnifándola, sacando unas 12 rayas de cada gramo y, en la mayoría de casos, tomándola junto con alcohol. Efectivamente, este suele ser el patrón habitual y podemos conocerlo gracias a este tipo de encuestas. Los resultados son de gran importancia y utilidad porque permiten, no sólo mejorar nuestro conocimiento sobre los hábitos de consumo de esta sustancia y otras, sino mejorar también la información que podemos darle para que los potenciales problemas derivados de su consumo sean los menores posibles.

Te puede Interesar
El consumo de cannabis en pacientes con cáncer redujo a la mitad el riesgo de morir en el hospital

La encuesta es totalmente anónima y se puede participar en ella a través de este enlace. El año pasado más de 100.000 personas de 50 países aportaron su experiencia en el consumo de drogas para convertir esta encuesta en una de las más importantes que se realizan en el mundo.

Fuente

Acerca del autor

Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.