El acusado arrojó una bolsa con 80 gramos de cannabis por la azotea cuando huía de la Guardia Civil

Un tribunal ha condenado a un traficante de drogas a indemnizar con 141 euros al dueño de unos perros que resultaron intoxicados por el hachís que arrojó en una azotea cuando huía de la Guardia Civil en Torrevieja (Alicante).

Así se establece una sentencia de la sección séptima de la Audiencia alicantina, hecha pública este lunes por el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunitad Valenciana, que impone tres años y medio de prisión y una multa de 180 euros al acusado por delito contra la salud pública, amenazas condicionales y daños.

Los hechos ocurrieron el 12 de febrero de 2016, cuando el sospechoso, un delincuente reincidente, amenazó, en su casa, con un cuchillo a una chica y la amenazó con matarla si su familia no le pagaba una deuda.

Este hecho llevó a la Guardia Civil a registrar su domicilio en Torrevieja, donde encontró una balanza de precisión, 432 gramos de cocaína y más de 900 de cannabis, sustancias que el acusado iba a destinar al tráfico.

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El implicado intentó huir, pero fue detenido por los agentes en la azotea del edificio, a la que accedió tras romper la ventana de una vecina y donde arrojó una bolsa con otros 80 gramos de hachís.

La droga fue mordisqueada por los perros de otro inquilino, que se hallaban en la terraza, lo que les produjo una intoxicación por la que tuvieron que recibir asistencia veterinaria. El juicio por estos hechos se celebró hace unos días en la Audiencia de Alicante, en su sección penal desplazada en Elche, y se saldó con un acuerdo de conformidad entre las acusaciones y la defensa.

El procesado se declaró culpable de los delitos antes citados y aceptó tres años de cárcel por el delito contra la salud pública y otros seis meses de cárcel por las amenazas a la mujer que le visitó en casa, a quien deberá indemnizar con 190 euros.

Además, la sentencia establece que deberá abonar otras dos multas que superan en total los 5.700 euros, indemnizar con 260 euros a la dueña de la casa cuya ventana dañó y con 141 al propietario de los perros intoxicados por la ingesta del hachís.

El tribunal ha accedido a suspender la ejecución de la condena -lo que le evita el ingreso en prisión- durante cinco años con la condición de que no vuelva a delinquir en ese periodo y se someta a un proceso de desintoxicación de estupefacientes

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Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.