En el Congreso federal continúan frenadas 17 iniciativas sobre el tema, incluyendo el uso medicinal y el incremento en la portación del gramaje

Los mitos y prejuicios alrededor de la mariguana, así como las presiones de los grupos conservadores, tienen congeladas 17 iniciativas presentadas ante el Congreso de la Unión para regular el uso medicinal y/o recreativo, según Juan Ramón de la Fuente, presidente del Aspen Institute en México.

Prejuicios como que la regulación será la puerta a otras drogas o que puede generar un aumento en el consumo, son algunos que el senador Roberto Gil Zuarth asegura que no tienen fundamentos.

“Se entiende que esto es un paso para regular todas las drogas y esto no es así. Nadie ha planteado eso, nadie ha planteado que, al legalizar la mariguana, vamos a abrir paso a un mercado de plena libertad para todas las drogas. La mariguana puede ser regulada porque ya tenemos evidencias científicas y médicas de que los efectos que provoca en la salud no son letales”.

También “se piensa que si regulamos la mariguana habrá una explosión en el consumo, pero la evidencia que nos revelan los primeros experimentos de regularización en Estados Unidos, nos sugieren que sí es posible regular sin necesidad de que pase esto, que a través de una buena combinación de precios, es posible evitar que el consumo se desate en una determinada comunidad”.

Además, al evitar el contacto de los consumidores con el mercado negro, podría evitarse el consumo de otros estupefacientes. “Se dice habitualmente que la mariguana es una droga de iniciación, eso también es absolutamente falso, lo que provoca que una persona adicta vaya de una droga a otra es la interacción con el mercado negro, si alguien va a comprar mariguana, le ofrecen cocaína y otros tipos de sustancias”.

Vicente Sánchez, investigador del Departamento de Estudios de Administración Pública del Colegio de la Frontera Norte (Colef), está convencido de que “los grupos conservadores tienen mucho poder e influencia en la toma de decisiones, así que esto ha atorado la aprobación de estas iniciativas”.

Política prohibicionista no resuelve problemas

Tomando la experiencia del Estado de Colorado en Estados Unidos, que junto con Washington aprobó el uso recreativo de la mariguana en 2012, Juan Ramón de la Fuente resaltó, en una columna publicada el 14 de noviembre, que desde la aprobación de esta política, la Entidad ha tenido “una significativa reducción en los actos delictivos y una muy estimable recaudación por motivos de impuestos”.

Sin embargo, en México “seguimos ‘cautelosamente’ esperando (…). Prohibir no resuelve, criminaliza al usuario, propicia la actividad delictiva, la corrupción, el lavado de dinero y la asociación del consumo de mariguana con otras drogas más nocivas”.

En esto coincide el senador Roberto Gil Zuarth, quien dice que no podemos seguir perdiendo vidas por la “guerra” contra el narcotráfico (130 mil tan sólo en el sexenio pasado de Calderón).

“México debe guiar su discusión en una revisión integral de la regulación, no podemos seguir insistiendo en la política prohibicionista, no podemos seguir persiguiendo a los consumidores con policías, ministerios públicos… ni tampoco castigarlos con la cárcel porque lo único que hemos logrado es más consumo y menor calidad en las sustancias y diversificación en ese mercado y violencia”, subraya Gil Zuarth.

Además, está la parte medicinal de la mariguana, en donde su regulación podría permitir que pacientes con enfermedades como Parkinson y cáncer tengan acceso a ésta para ser tratados.

De la Fuente lo deja claro: tenemos una disparidad importante con EU: mientras que Florida aprobó el uso medicinal con el 70% de los votos, “en México, la Cofepris (Comisión Federal Para la Protección contra Riesgos Sanitarios), desde que llegó José Narro a la Secretaría de Salud, ha aprobado más de 150 solicitudes de pacientes y familiares que la requieren”, pero no se legisla.

LEGALIZACIÓN GENERARÍA ECONOMÍA E INVESTIGACIÓN

Te puede Interesar
México: Se planea crear plataforma digital sobre marihuana

Una de las enseñanzas, según académicos, que nos ha dejado la legalización de la mariguana, tanto para fines recreativos como medicinales en Estados Unidos, es el hecho de que los impuestos a este mercado pueden generar grandes ganancias, las cuales pueden ser destinadas a distintas campañas e investigaciones sobre el uso de las drogas en el país.

En su iniciativa, el senador Roberto Gil Zuarth propone un control en los precios, los cuales no deben ser muy bajos, para no incentivar el consumo, pero tampoco tan altos, que sigan impulsando el mercado negro.

En California, Massachusetts, Maine y Nevada, que fueron los estados de la Unión Americana que dieron el “sí” a la legalización del uso lúdico de la mariguana, se deberá pagar el 15% de impuestos.

De hecho, Juan Ramón de la Fuente indica que “este año el mercado para su uso medicinal y recreativo en los Estados Unidos superará los siete billones de dólares y, en cuatro años, se estima que llegará a los 22 billones. La cifra es apabullante, sobre todo si se compara con los 111 millones de dólares que en este año dedican a la investigación del cannabis los institutos nacionales de salud de ese país. En México, que yo sepa, no hay un solo protocolo de investigación en materia financiado por el Estado”.

Además, está el hecho de que podamos considerar a la mariguana como un problema de salud pública y no como uno de seguridad, lo que nos ayudará a crear verdaderas campañas de “prevención, tratamiento y rehabilitación, en lugar de la cárcel para los usuarios, y permitiría captar recursos para fines de investigación y campañas masivas de información y educación”.

Una de las situaciones que resalta es que, “por hacer exactamente lo mismo, sembrar mariguana, un joven emprendedor norteamericano tenga un buen ingreso, pague sus impuestos, sea un ciudadano respetable y mande a sus hijos a una buena escuela; mientras que, a unos cuantos kilómetros de distancia, un campesino mexicano siga viviendo en la pobreza, sea explotado por los narcos y, eventualmente, detenido y encarcelado por la justicia mexicana”.

Advierten de riesgos tras aprobación en California

El Estado de California es la economía más grande con la que cuenta Estados Unidos y es el principal mercado de la mariguana mexicana. Es por eso que la legalización de esta droga con fines recreativos es importante para México.

“Lo que generará la legalización en California, en primer lugar, es que le va a dar mayor visibilidad al debate en nuestro país, porque el hecho de que el mayor mercado de la mariguana mexicana haya legalizado, pues implica que buena parte de la mercancía de la exportación se quede sin un mercado y, eventualmente, se queden sin utilidades los que hoy se dedican al tráfico de la mariguana en California”, dice el senador Roberto Gil Zuarth.

Además, según un estudio hecho por el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), la regulación de esta droga en Estados Unidos generaría una reestructuración de los carteles mexicanos.

“Si estamos calculando en 50 mil millones de dólares, que representa para México el negocio de las drogas (cada año), según cifras estimadas de las Naciones Unidas, pues debemos de pensar que la mariguana juega un papel importante y, al ir legalizando poco a poco en Estados Unidos, pues hay clubes que cultivan para consumo propio y, al haber esto, desde luego ya no hay una demanda por este tipo de enervante. La demanda baja y obviamente bajan los ingresos provenientes de la mariguana”, asegura Fernando Espinoza de los Monteros, profesor investigador de la División de Estudios Jurídicos de la Universidad de Guadalajara (UdeG).

El senador comenta que con legalización en Estados Unidos, “es muy probable suponer que se van a quedar, en el corto plazo, sin una importante ganancia y que van a intentar subsanar eso con otro tipo de actividades ilícitas; es decir, que se van a diversificar, que van a cambiar de negocio, que hoy están exportando mariguana ilegal a EU, que representa el 40% de sus ganancias, pero el día de mañana, como eso ya no será negocio, seguramente se van a dedicar a robos y otras prácticas”. Son parte de los riesgos si no se legaliza en México.

Te puede Interesar
Enmarañados en el cáñamo

Por otro lado, está el hecho de que California es un Estado fronterizo y es allí en donde entran los problemas sociales. “La principal preocupación es que la mariguana que estaba destinada a Estados Unidos, pueda quedarse del lado mexicano y al alcance las personas que puedan entrar a las adicciones. Además, tal vez, en algún momento podría invertirse el flujo del enervante; es decir, que se traficara de Norte a Sur, para el mercado regional. Por ejemplo, aquí en la Frontera tenemos muchos residentes americanos, entonces ellos podrían generar un mercado en sí mismo”,  señala Vicente Sánchez, investigador del Departamento de Estudios de Administración Pública del Colegio de la Frontera Norte (Colef).

En este sentido, Gil Zuarth indica que “va a generar un problema de orden comercial fronterizo, podrá haber consumo legal en San Diego y consumo ilegal en Tijuana, quien quiera consumir simplemente cruzará la frontera, adquirirá la dosis, la consumirá y después regresará a nuestro país, y eso va a provocar que buena parte de la oferta que hoy está en nuestro país se incremente, que baje la calidad y que quede más producto disponible y que en consecuencia tengamos una explosión de adicciones o de consumo en el lado mexicano, porque habrá un excedente en el mercado”.

El hecho de que se pueda cruzar de una ciudad a otra para obtener mariguana de forma legal, dice Jorge Castañeda, profesor de la Universidad de Nueva York, es el punto clave para legalizarla en nuestro país. “Yo creo que se vuelve insostenible la ‘guerra’ contra el narcotráfico, porque no tiene sentido mandar a soldados mexicanos a quemar sembradíos, a poner retenes en las carreteras o a buscar narcotúneles en la frontera, cuando en el otro lado la mariguana se consigue fácilmente”.

Al legalizar la droga en nuestro país, coinciden, se estaría regulando y entrarían recursos para realizar campañas de prevención a las drogas y comenzar a ver este como un problema, no de seguridad, sino de salud pública. Además, perdería valor en el mercado negro y sería un golpe real a los carteles mexicanos.

VOCES

El debate sobre la cannabis

“Este año el mercado para uso medicinal y recreativo en los EU superará los siete billones de dólares y, en cuatro años, se estima que llegará a los 22 billones. México debe guiar su discusión en una revisión integral de la regulación”.

Juan Ramón de la Fuente, presidente del Aspen Institute en México.

“Es momento de darle un poco más de sentido humano, de racionalidad a la política y dar pasos en la dirección de la regulación del consumo. Se trata de sustituir el sistema de abastecimiento por un régimen de control público”.

Roberto Gil Zuarth, senador.

“Se vuelve insostenible la ‘guerra’ contra el narcotráfico, porque no tiene sentido mandar a soldados mexicanos a quemar sembradíos, a poner retenes… cuando en el otro lado (California) la mariguana se consigue fácilmente”.

Jorge Castañeda, ex canciller y profesor de la Universidad de Nueva York.

Sigue: #DebateInformador

Ante la legalización de la mariguana en Estados Unidos, ¿México debe acelerar la discusión en el Congreso de la Unión?

Fuente

Acerca del autor

Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.