En Arica lanzarán primer club cannábico medicinal de Chile

En el marco del evento Aricannabis Expo & Show, el 2 de septiembre se lanzará en Arica el primer club cannábico medicinal de Chile.

La actividad se desarrolarrá este viernes a las 10 horas, en el auditorio de Investigaciones de Chile (PDI), ubicado en  calle Angamos 990, Arica. 

La apertura del evento estará a cargo del médico Sergio Sánchez Bustos con una charla sobre uso medicinal, cultivo colectivo, perspectiva futura de estas organizaciones y su legalidad. Expondrán también galenos peruanos sobre la situación en dicho país y cómo podemos colaborar, como naciones vecinas y hermanas, con un modelo adecuado en el uso del cannabis. Además intervendrán autoridades y candidatos locales de la próxima elección municipal, para finalizar la sesión con un taller de autocultivo de la asociación “Dios te Salve María”. 

“Los clubes cannábicos son la respuesta para muchas personas que necesitan acceder a la planta y no pueden porque no saben hacerlo, no tienen el espacio suficiente o requieren de algún tipo de apoyo debido a su enfermedad”, dijo el doctor Sergio Sánchez Bustos, presidente de la Fundación Latinoamérica Reforma, que patrocina al Club Cannábico BOCI. 

El médico, quien ha estado atendiendo pacientes en Arica desde mayo, advirtió que “ya existen muchos cultivos colectivos de cannabis en Chile, pero ya es tiempo que salgan a la legalidad, porque son de gran ayuda y corren un tremendo riesgo por culpa de la ley 20.000”.

Tanto el uso medicinal como el recreativo del cannabis están permitidos en nuestro país, lo que se persigue es el narcotráfico y los tribunales han entendido que los cultivos colectivos no provocan riesgo, ni siquiera futuro para la salud individual de terceros, atendido que la droga no está destinada al tráfico ilícito. 

Cabe recordar que en el Fallo de la Corte Suprema del caso de Paulina González de Trigrama, de junio del 2015, se determinó que “con el cultivo de las plantas que le fueron incautadas en su domicilio, la acusada estaba ejerciendo en forma legítima sus derechos”. 

Tampoco para estos casos se precisaría autorización del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), puesto que no es competencia técnica de esta institución los cultivos urbanos y no industriales.

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